Hoy te cuento algo que posiblemente te va a volar la cabeza.
Palabrita de boy scout ( nunca he sido Boy Scout, pero ya te digo que te va a sorprender).
Durante muchos años se ha considerado que la economía es como una receta.
Un poco de esto un poco de lo otro .
Voila … aqui tienes tu tortilla hecha.
Todo muy racional
Si delante tuya tienes dos opciones, como eres un tipo racional
¿Cual vas a escoger?
Siempre la mejor, la que más probabilidad de obtener un elevado beneficios tenga para ti.
Vamos, que no se te escapa una.
.
Y si te digo que eso no es así.
Y si eres más irracional que un gremlin a las 12 de la noche.
Más influenciable que un niño de 3 años
Más irracional que rebobinar un C.D. con un dedo.
Quizás pienses que exageró, es posible.
Venga…
Hay varios experimentos que lo demuestra, en el curso “para dispersos financieros”te cuento uno donde por un céntimo.
Si uno solo.
Ni 2 ni 3 … solo 1.
La mayoría de las personas cambiaron su decisión.
.
Piensa.
¿Cambiarias tu manera de actuar por un mísero céntimo?
¿Es más alguna vez has visto un céntimo en el suelo y no te has agachado?
Si es así… en que cabeza cabe que alguien pueda cambiar de opinión por un mísero céntimo de euro.
Pues ya te adelanto que si.
Y es que las apariencias engañan.
Y no siempre actuamos de un modo racional .
Ten esto en cuenta (o no, como quieras)
¿Y donde ves esto?
En el capitulo 4 del curso “para dispersos en finanzas y esas cosas”
Que pronto tendrás en tu bandeja de entrada si esta dentro de la menbresia
Y si no también.
Te voy contando.