Como no paralizar (otra vez) tus buenos propósitos.
Ponle garra.
Lo que te voy a contar hoy, puede ser justo lo que necesitas para dar ese primer paso que no te atreves a dar.
Para dejar de ser el "tamagotchi procrastinator".
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Y es que..
Si sientes una angustia creciente por no hacer lo que te propones.
Si empiezas con una energía desbordante que, en pocos días se desvanece de un modo efímero como la canción de Melendi .
Hoy, esta historia te interesa.
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Ayer me escribió un suscriptor que quiere ahorrar y sabe exactamente qué hacer, pero siempre surge algo que le impide arrancar.
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Esto me recordó a la siguiente escena escalofriante de "Jurassic Park".
La noche cae como un manto oscuro y el parque, que era un oasis de tranquilidad, se transforma en un infierno.
Los sistemas de seguridad fallan, liberando a los monstruos que acechan en la oscuridad.
De repente, el parque se suma en el caos.
Lex y Tim Murphy, dos niños que corrían despreocupados por la parte central del parque, de repente se encuentran solos y aterrados.
Deciden refugiarse en una cocina industrial, pero en las sombras, dos velocirraptores los acechan silenciosos, sus ojos brillan con una inteligencia fría y letal.
Uno de ellos entra sigilosamente en la cocina. Los niños, paralizados por el terror, no se atreven a moverse.
De repente, Tim deja caer una cuchara.
El sonido metálico resuena como un grito en el silencio, atrayendo la atención del espigado dinosaurio.
Como una sombra letal, el velocirraptor se lanza hacia donde estan Tim y Lex.
Tim, petrificado por el miedo, no puede moverse.
Lex, con el corazón latiendo como un tambor, reacciona y corre al otro lado de la cocina.
El velocirraptor se acerca cada vez más, Tim siente su apesto aliento en su cara.
En ese preciso instante, desde el otro lado Lex agarra una cuchara y la golpea contra el suelo, el sonido resuena como un eco siniestro, atrayendo al dinosaurio hacia ella.
El velocirraptor, confundido, se gira y se lanza hacia su nueva víctima.
Lex ha conseguido salvar a su hermano, pero ahora es ella quien está en peligro.
Desesperada, se mete dentro de un pequeño mueble de la cocina. La puerta se queda encajada y, presa del pánico, grita, sabiendo que su final está cerca.
El velocirraptor la ve y se lanza hacia ella, sus garras raspan el suelo, su boca abierta en un rugido silencioso.
Justo cuando parece que el dinosaurio la va a devorar, choca contra un mueble frente a ella y queda inconsciente.
La superficie reflectante del mueble ha engañado al dinosaurio, gracias al efecto espejo.
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Bien.
Y ahora pensarás: ¿todo esto a qué viene?
¿Te han sentido alguna vez como Tim?
Paralizado sin actuar.
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Mira
Mucha gente quiere hacer un cambio importante en su vida, en el caso de hoy conseguir ahorrar, pero no acabar de arrancar, permanecen paralizados… más inmóviles que un playmobil.
Se dejan llevar por la comodidad, por la parte más primitiva del cerebro.
En la misma donde se desarrolla el terror de Tim.
Esa que no quiere gastar recursos.
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¿Como se puede combatir esto?
Posiblemente si, con pequeños(incluso minis) pasos firmes y constante.
En la nuevo curso que estoy construyendo te habló precisamente de esto y como gracias a esto, un equipo olímpico pasó de solo “comerse los mocos” a ser campeones olímpicos.
P.D. Quizás te apetezca compartir este correo. Pues no te cortes, dicen que compartir te hace más feliz.
P.D. Ya sabes… por aquí dos orejas grandes, que te escuchan(forever).