Ese tipo de gente que va de guay y no llega a chachi
Estoy seguro de que conoces alguno así.
Son las 23:41
Voy más lento que rápido.
Ósea, rápido.
Como sabes soy un firme defensor del poder del email marketing.
Para no serlo después de haber enviado más de 300 correos.
Pero hay un tipo de gente que no se le da nada bien.
Esa gente que tiene un problema de autoestima mal gestionada.
Escucha
Porque estoy casi seguro que esto te ha pasado alguna vez, sobre todo si trabajas por cuenta ajena.
De repente y sin previo aviso, recibes un correo de un compañero para ti, pero con copia a “todo cristo”, a todos los jefes habidos por haber.
Por supuesto este compañero (por llamarle algo) no te ha llamado antes para contarte de que va lo movida.
No!
Pero como te va a avisar antes.
Si no ¿Quién se va a llevar el mérito?
Él no
Tú sí.
Sin previo aviso te pasa por delante.
Y lo peor sin respecto.
¿Cómo se llaman estos tipos?
Los “queda bien”.
Los “me pongo flores”
Los “renaldos” de turno (te acuerdas de aquel fichaje del Dépor que cuando llegó dijo que era una mezcla de Ronaldo y Rivaldo, y no marcó un gol al arco iris).
Qué mala vibra dan.
En fin.
Sabes la solución para evitarlos.
Mantenerlos lejos.
Pero muy muy.
Cerca para qué.
Porque sabes una cosa, no te respectan y lo peor nunca lo harán.
Porque tú eres mejor que ellos.
Porque tú nunca harías eso.
Porque tú vales por lo que haces y no por lo que aparentas.
Aparentar no es lo tuyo
Eres lo que eres
Y vales un Potosí.
P.D. Por cierto, este correo te llega a ti porque quieres estar aquí, y yo encantado que estés.
Porque el importante aquí eres tú y tu dinero.
Qué libertad da escribirte así.
Mucha.
En fin
Te dejo que mañana toca madrugar.
Nos vemos pronto … muy pronto.
Son las 0:03