Mientras escribo este correo, estoy esperando en el dentista.
La que me espera en la sala de espera.
Al fondo suena “The sound of silence” de los míticos Simon and Garfunkel.
Escuchándola instantáneamente mi mente me ha llevado al asiento de atrás de un peugeut 309 Gris.
Con mi padre y mi madre delante y mi hermano a mi lado.
Y al fondo sonado esta canción
En esas radio de antes con sus reproductores de cassettes incluidos.
¿El título del cassette?
“varios”
cual si no.
y que Varios…!
Recuerdo que incluía la mítica canción “Dusting in the wind” de Kansas o “stand by me” de Ben E. King.
Temazos
¿Qué no?
.
Que recuerdos
Que emoción montarse en el coche después de ver a mi padre hacer magia.
Si, porque nadie más que él sería capaz de meter ese mamotreto de maletas en aquel maletero “tan chiquito”.
Estoy casi seguro que fue él quien inventó el tetrix (o casi).
Para mí aquello era inicio de una trepidante aventura .
Y es que …
Por fin el verano había llegado.
Toc toc…
Diga?
bueno
Toca volver a la realidad.
Me acaba de llamar el dentista.
Ya me toca, mieldaaa.
No me gusta el dentista
Lo odiooo.
Pero pienso en el “después” y la tremenda sonrisa que me va a quedar.
De eso se trata
“El después”.
Verás
Si lo piensas ir al dentista es parecido a lo que pasa con el ahorro
Porque privarse de ciertas cosas no mola nada, duele casi como cuando te quitan una muela.
Pero a la larga compensa
Vaya que si
De eso se trata
Por lo menos lo veo así .
Te dejo que el dentista se me cabrea y no es plan que le entre la prisa y se quede corto con la anestesia .
P.D. La elaboración del curso sigue su curso (valga la redundancia)
Encontrarás una selección tan buena como el casete de “varios” de mi padre
Palabrita